Se terminan las vacaciones, las siestas, irse a dormir tarde y tener los horarios cambiados. Empieza la rutina, el tener que despertarse pronto para ir a trabajar, y tener que lidiar con la presión diaria del trabajo. Al volver al trabajo diario con unos horarios establecidos, y unas obligaciones a cumplir puede ocasionarnos ansiedad, estrés, falta de concentración, y también desmotivación. ¿Cómo lidiar con todas estas sensaciones que experimentamos al volver al trabajo?
Durante las vacaciones nuestro cuerpo está más relajado que de costumbre, y tenemos la sensación de más libertad, incluso durante las vacaciones podemos llegar a experimentar más alegría y disfrute que durante el resto del año. Pero el volver a los restantes once meses del año donde no tenemos vacaciones tan largas, puede ser muy difícil en ocasiones causándonos ansiedad, depresión, malestar con nosotros mismos e incluso depresión. Algunos incluso llaman a esta serie de síntomas sindrome postvacacional, cuando las emociones se complica, llegando a experimentar incluso, palmitaciones, insomnio dolores musculares o ansiedad generalizada.
Es totalmente normal que al reincorporarnos al trabajo cueste un poco volver a coger el ritmo, los horarios y las obligaciones pertinentes.
Para gestionar la vuelta al trabajo de una forma relajada es importante:
- Para que el estrés no se nos venga encima de repente, es recomendable volver a casa un par de días antes para poder aclimatarse e ir recuperando la rutina (horarios, comidas, sueño) poco a poco.
- Empezar de manera gradual la intensidad del trabajo, de manera que las tareas más fáciles o motivantes las hagamos al principio.
- Dejar ratos de ocio para la semana que se empieza a trabajar, para estar con la familia, o con los amigos. Para realizar alguna actividad o afición, de esta manera el cambio no es tan brusco.
- Buscar otra motivación extra a parte de las vacaciones del año que viene. ¿Qué cosa del día a día te motiva?(Poder hacer una tarea concreta en el trabajo, poder disfrutar cosas concretas con la familia, poder hacer esa afición que tanto nos gusta, etc)
- Encontrar un proyecto que te ilusione y que te ayude a estar más en el presente.
- Dormir suficientes horas también es importante para prevenir el estrés y el cansancio.
- Hacer ejercicio moderado, durante la semana.
- Hacer respiraciones como las que sugiero en éste artículo, o realizar técnicas de relajación específicas. Otra opción puede ser apuntarse a yoga, o meditación.
No dejes que la ansiedad te controle al volver al trabajo, tu puedes lidiar con ella.
Fíjate que digo lidiar y no vencer, porque si decimos vencer, estamos dando por supuesto que la ansiedad es un enemigo, y no lo es, es una señal,que está expresando nuestro cuerpo de que necesita ser atendido adecuadamente, de que necesita atención.
Si después de estas recomendaciones sigues sintiendo que la ansiedad es demasiada te recomiendo que consultes a un especialista.
¡Buena reincorporación al trabajo!