Blog de Psicología emocional
Tu espacio de terapia y crecimiento emocional
Aprende inteligencia emocional con el blog Psicoemocionat
Todos los artículos que hemos escrito para ti
El amor, es un sentimiento muy profundo que experimentamos desde pequeños, hacia nuestros padres. El amor fluye de padres a hijos, y de hijos a padres. Como padres, podemos sentir que damos todo lo que podemos a nuestros hijos, y lo hacemos lo mejor que sabemos. Como hijos, podemos sentir a veces que lo que nuestros padres nos dan no es suficiente. Qué aún nos podrían dar más de lo que nos dan o nos han dado.
Hablar desde el «yo»
Si al hablar con nosotros mismos dejáramos de tratarnos en 2ª persona y habláramos en 1ª persona, podríamos darnos la oportunidad de conocernos mejor. ¿Sabes cuando estás, triste que te sientes como apagado,y sin fuerzas? Esto es hablar en 2ª persona, en cambio hablar en 1ª persona sería: Estoy triste, me siento apagado y sin fuerzas. ¿Véis como cambia la cosa? Hablando desde el «yo» nos podemos responsabilizar de lo que sentimos, pensamos y de cómo actuamos.
Volver a confiar cuando el amor duele
Cuando somos niños, nuestra tendencia natural, es confiar en los demás. A medida que nos vamos haciendo mayores, nuestras experiencias de vida, con nuestros padres, primero, y después con la gente que nos rodea, hace que esa confianza en los demás, y en la vida, se pueda ir haciendo cada vez más pequeña. ¿Por qué? Pues porque también descubrimos que nos pueden hacer daño, y que lo que esperamos de los demás no siempre se cumple.
Aprender a soltar y dejar ir ¿cómo?
Aprende a soltar y dejar ir en 6 pasos. Muchas veces nos aferramos a personas, cosas o situaciones por miedo a perderlas. Es tal el miedo, a estar sin ellas,
La curva de las emociones
La mayor parte de nuestro día, lo pasamos hablando desde nuestra parte más racional. Aunque en nuestro telón de fondo siempre están las emociones que van apareciendo en el escenario
¿Vives en piloto automatico?
¿Vives la vida?¿O vives en piloto automático? Ir en piloto automático significa no darnos cuenta de lo que nos está pasando en nuestro interior. Simplemente ir tirando, ir pasando la vida, sin parar un momento a observarnos internamente.Puede haber épocas donde vivamos más en piloto automático, donde nos dejemos llevar por la inercia de la rutina y de la actividad. Lo importante, es que nunca es tarde para pasar a un estado en el que nos hagamos conscientes de lo qué sentimos, y de lo que necesitamos en nuestra vida.
Felices fiestas, intentalo más que ayer
Vamos por el mundo creyendo que estamos atados a cientos ideas que nos restan libertad en nuestro día a día. ¡Aprovecha estas fiestas y este nuevo año que comienza para liberárte de todos eso «no puedo» que hay en tu vida! Tu eres el único que te limitas, ni tu pareja, ni tus familiares, ni tus hijos, ni tus amigos, ni tus enemigos. ¡Sólamente tú! Desde Psicoemocionat ¡os deseamos, una muy buena navidad, y unas felices fiestas! Que este año 2014, sea el año en el que vivís, nuevas experiencias, que os atrevéis a decir, o hacer aquello, que nunca hubierais dicho u hecho….Vosotros sóis los que lleváis las riendas de vuestra vida, no lo olividéis nunca! Os deseamos calma, paciencia y serenidad para que estas fiestas, sean como vosotros queráis que sean. Os dejamos un cuento de Jorge Bucay, para que os inspiréis esta navidad.
Nuestros saboteadores internos
Dentro de cada uno de nosotros viven dos personajes, dos saboteadores internos que se pelean entre ellos. Son esas voces interiores que invaden nuestra mente, y nos van mareando en el día a día. Fritz Perls, los llamó el «perro de arriba» y el «perro de abajo». Cada uno tiene un rol bien diferenciado dentro nuestro. ¿Te suenan éstas palabras? Tengo que hacer cosas de trabajo….uf que palo las hago luego…. Tengo que limpiar la casa… mañana sí eso…. No me tengo que poner nervioso…. uf pero me tiemblan las piernas….. Todos estas frases ejemplifican nuestros pensamientos que la mayoría de veces son opuestos. ¿Sabes identificar tus pensamientos saboteadores? ¿Sabes qué hacer con ellos?
Motivos por los que iniciamos una terapia
Podemos sentir que tenemos un malestar interior que no nos deja avanzar en nuestra vida, y queremos cambiarlo, queremos sentirnos mejor. Primero intentamos resolverlo nosotros mismos, o con ayuda de alguna persona cercana, pero cuando vemos que esto no es posible, ahí nos podemos plantear buscar ayuda de un psicoterapeuta. Dar el paso de pedir ayuda puede no ser fácil, pero a veces es necesario. Hasta ahora, quizás lo que hemos intentado para solucionar el problema no ha funcionado, necesitamos ponernos unas nuevas «gafas» con las que ver nuestro mundo interior.