¿Crees que un bebé recién nacido siente igual que los adultos? ¿Te has preguntado alguna vez qué emociones experimentan los niños? ¿Sabes cómo van evolucionando las emociones en los niños? ¿Alguna vez has pensado que un bebé está falseando su emoción para engañarte? ¿Crees que como padre o madre podrías ayudar al desarrollo emocional de tus hijos?
En este articulo descubriremos el desarrollo emocional en profundidad y entenderemos por qué fases pasa el niño hasta llegar al desarrollo emocional completo.
¿Los bebés nacen con las emociones innatas o se aprenden?
Es cierto que las emociones son mecanismos naturales e innatos.En el momento de nacer todos los humanos partimos de una base emocional común. El bebé desde que nace tiene un repertorio de reacciones emocionales básicas que le ayudan a sobrevivir y a generar relaciones de apego.
Aunque en un principio todos partamos de un base emocional común, según el niño va viviendo diferentes experiencias se irá desarrollando un patrón emocional único y específico de cada individuo. Dicho patrón estará determinado por cómo cada uno percibe las emociones, las interpreta y las gestiona.
¿Qué tipos de emociones experimentan los niños?
En primer lugar aparecen las emociones primarias o básicas Las podemos identificar porque son reacciones afectivas innatas, muy distintas entre ellas y que se expresan de una forma característica. Paul Ekman, considera que son seis las emociones primarias, la ira, la alegría, la tristeza,el miedo, el asco y la sorpresa. Después Ekman también añadiría el desprecio a las emociones primarias.
Más tarde, y como resultado del crecimiento, la interacción con los demás y la combinación de varias de las emociones primarias, se empezarán a identificar las emociones secundarias, que son más complejas.
Las emociones secundarias no se identifican fácilmente a través de un gesto como una sonrisa. Estas emociones son aprendidas, mentales y no cumplen una función biológica adaptativa. Por ejemplo, la culpa o el orgullo.
¿Cómo se desarrollan las emociones que experimentan los niños?
El proceso de desarrollo emocional es fascinante y aunque a día de hoy tenemos muchos datos, todavía tenemos mucho por descubrir. ¡Vamos a verlo!
Del nacimiento a los 5 meses del bebé
En los primeros momentos del nacimiento, el bebé ya muestra expresiones emocionales, ya que cualquier emoción se convierte directamente en conducta o acción. Los niños representan la emoción que siente sin filtro y en los otros piensan que la emoción que se expresa es la que realmente sienten.
En este momento los berrinches o rabietas son completamente normales,son una manera de expresar gran variedad de emociones como la rabia, la frustración o la tristeza. Los bebés recién nacidos poseen las llamadas emociones de supervivencia que son el llanto, las muestras de interés y de disgusto.
Al mes de vida son capaces de reconocer en los demás emociones como la alegría y el enfado. A los 3 meses, aparece la sonrisa social, que estimula a los adultos a que interactúen con ellos.
«En el cuarto mes el bebé comienza a reír con sus juguetes y sabe diferenciar entre un gesto de enfado y uno de tristeza».
Durante el quinto mes empieza a desarrollar el interés hacia otros estímulos que lo rodean. Aparece la sorpresa cuando espera una sonrisa y observa una cara de enfado.
De los 6 meses al primer año de vida
En el sexto mes, el bebé se excita dando muestras de alegría, chilla o ríe cuando se juega con él. Comienza a tener reacciones de asombro. En el séptimo mes, cuando se enfrenta a estímulos desconocidos o inesperados, el niño muestra ansiedad.
Saben distinguir una emoción agradable o más desagradable. En el octavo mes aparece el miedo y la culpa, por lo que es el momento en el que el niño puede entender algunas consecuencias.
Todo parece indicar que es a los 12 meses cuando los niños muestran toda la gama de emociones básicas comúnmente conocidas: alegría, miedo, tristeza, ira, sorpresa y asco.
Entienden todo lo que se les dice y tienen ganas de comunicar pero aún no pueden expresarse verbalmente. En esta época debemos ayudar a los niños a mejorar su lenguaje emocional y a manejar sus emociones.
De los 2 a los 6 años
A partir de los 2 años ocurre un acontecimiento muy importante, el niño adquiere la capacidad de juego simbólico y comienzan a tomar perspectiva y ponerse en el lugar del otro. Esto aumenta el desarrollo emocional, por la capacidad de percepción e interpretación de las emociones de los otros.
De los 3 a los 6 años, los niños ya son capaces de comunicarse a través del lenguaje y empiezan a utilizar etiquetas para hablar de sus emociones.. El niño empieza a expresar estados emocionales o estados internos. A través del lenguaje comienzan a organizar sus experiencias y a comprender la causa y el efecto de sus acciones.
En este momento establecen explicaciones correspondientes a través de la emoción. Solo son capaces de entender las situaciones son buenas o malas. Todavía no son capaces de entender la graduación.
Es una época maravillosa para hablar con los niños mucho de emociones, utilizar juegos donde el objetivo sea descubrir o hablar sobre emociones, utilizar situaciones de la vida cotidiana para preguntarle cómo se ha sentido el o ella y que creen que han sentido los demás.
De los 6 a los 12 años
En esta época ya son capaces de compartir un lenguaje común, llevar a cabo planes de acción siguiendo una secuencia de pasos y lo que es más importante, en esta época consiguen tomar diferentes perspectivas de una misma situación.
Esta última les ayudara a comprender que una misma situación puede generar diferentes emociones o un combinado de ellas. Esta habilidad será clave para entender que lo que para unos puede ser positivo para otros no necesariamente. Les ayudará a comprender y empatizar con sus más allegados y a ser compasivo con sus propios estados emocionales.
Cuanto más se trabaje en esta época más facilidad van a tener para reconocer sus emociones y a continuación poderlas comunicar. Un buen desarrollo emocional es básico para mantener el bienestar emocional.
El acompañamiento de la familia en las emociones de los niños
Como hemos podido ver el desarrollo emocional del niño es muy intenso. Casi cada mes podremos vivir un evento nuevo, y no dejarán nunca de sorprendernos.
Como padres lo más importante es que podamos disfrutar con ellos de este crecimiento, teniendo en cuenta qué emociones experimentan los niños. Pero si además queremos darles un empujón debemos estar muy atentos de tres aspectos fundamentales. La comprensión emocional, la toma de perspectiva de las emociones e ideas de los demás y las herramientas para regular emociones.
Como padres hemos desarrollado cantidad de estrategias que podemos aportar a nuestros hijos, como la manera en la que escuchamos, la manera en qué preguntamos o como nos acercamos a alguien cuando está triste. Sería maravilloso que los niños desde bien pequeños vieran como sus padres se relacionan con otros a nivel emocional, como se acompañan y se atienden.
Si os ha gustado el artículo y os apetecería que os acompañemos a vosotros o a vuestros hijos en el maravilloso mundo del desarrollo emocional no dudéis en poneros en contacto con el equipo de Psicoemocionat.
